domingo, 16 de noviembre de 2008

Más rípios

Noria que sin rumbo avanza
repitiendo sin fin su camino,
carrusel lleno de esperanzas
sube y baja en manos del destino.

¿Como revelarme de este sino?
¿Como dejar esta noria?
Para trazar mi camino,
para cambiar esta historia.

¿Esperar gracia, por ventura
de los misericordes hados?
¿Despertar quizá la ternura
de los invisibles amos?

¿O clavar quizá uñas y dientes
sobre la bestia malvada,
conformismo y tristeza anidada,
por otros puesta en mi mente?

Con nieve ya en las alturas,
sin fuerza para esfuerzos vanos.
La noria no se para, todos a una
empujemos ¡Vamos!

jueves, 15 de mayo de 2008

miércoles, 14 de mayo de 2008

Miguitas

En la vida todos queremos comer una gran tarta. Anhelamos que nos suceda algo realmente extraordinario, queremos el premio gordo. Sin darnos cuenta fijamos nuestra atención en algo que seguramente no tendremos nunca y en consecuencia nos sentimos frustrados. A mi personalmente no solo no se me ha dado la tarta, sino que se me ha quitado la pequeña porción que tenía. Y solo entonces me he dado cuenta de la gran cantidad de miguitas que surcan mi camino.
Miguitas insignificantes en apariencia para quien solo piensa en la tarta, pero...
Poco a poco te vas acostumbrando a disfrutar de un pequeñisimo dulce en mitad de todo lo amargo, a saborear una deliciosa miga cuando estás hambriento.
Una miga de cariño, una salpicadura de ternura, una gotita de felicidad...
Me alegra saber que algunos consiguen su tarta, pero doy gracias a Dios por mis miguitas.

viernes, 28 de marzo de 2008

Un ripio

¡Cuantas olas han barrido mi playa!,
Tempestuosas y asoladoras
Cuantos vientos las arenas antaño doradas
Arrastraron al mar de mis horas.

Horas de vida en suspenso
Horas de oscuridad y tinieblas,
Horas que si ahora lo pienso...
¡Ay corazón! ¿Por que tiemblas?

Si el destino de los hombres en los astros está escrito,
Si el camino de mis pasos fue en la eternidad propuesto,
De ese futuro impuesto, que me ha sido prescrito
Desde el fondo de mi alma de este mi sino protesto.

Mi playa está desolada, mas rendirme ni lo pienso
Lucharé por mi mañana ya que mi hoy está muerto.
Levantaré hoy mi espada, guiaré mi nave a puerto,
Y en buscar una esperanza gastaré mi último aliento.

"Reventaito"

Cuando estoy cansado me da por pensar, bueno, cuando no lo estoy también, quiero decir que me pongo a filosofar...
Hay hombres (dichosos ellos) que ven la botella medio llena, decimos que son optimistas. Hay hombres (pobres de ellos) que ven la botella medio vacía, decimos que son pesimistas.
Y hay hombres (yo), que no vemos la botella por ningún lado, que tenemos que llevar el agua (la vida se sobreentiende) en el cuenco de las manos, que se nos escurre entre los dedos y tenemos que hacer malabarismos para conservar unas gotas, o al menos las manos húmedas. A estos no se como llamarles.
Realmente no existen botellas, una botella, un recipiente tan pequeño no puede contener algo tan extenso como la vida; me alegro de no tener botella, desde que no la tengo me voy dando cuenta de que tengo algo de agua en mis manos, pero además estoy rodeado, sumergido en ella, y que no me tengo que preocupar por conservar un poco, sino aprender a nadar.
Definitivamente el agotamiento es un buen psicotrópico.

jueves, 27 de marzo de 2008

El comienzo

En contra de mis costumbres, aunque en el fondo con cierto placer, comienzo este blog, este diario virtual, que más que diario será semanario o mensuario o como se diga. No creo que lo pueda atender con regularidad, pero trataré de publicarlo con el afán de hacer sentir bien a quien por casualidad caiga en esta zona de la "red".
No se sienta en la obligación de dejar ningún comentario, que tenga un buen día, vuelva cuando quiera... es bien recibido.